1 de abril de 2012

Esquizofrenia moral.


Por: Antonieta B. de de Hoyos

Un día, cuando me invitaron a dar una pequeña charla sobre superación personal, me encontré frente a frente con una  de esas asistentes que llegan al lugar, con la intención de molestar. Al termino de mi disertación recuerdo que le dije: “Sería mejor que disfrutaras la belleza de la luna, en vez de  criticar el dedo que te la señala”. Recuerdo muy bien que desde que aprendí este proverbio, no he desperdiciado los buenos momentos en discusiones insulsas.

Creo que lo mismo nos está pasando ahora, ya que después de que nos visitó Su Santidad Benedicto XVI, perdemos el tiempo en críticas en vez de instruirnos con la sabiduría de su mensaje y la gratuidad de su presencia. Gracias al internet empecé a recibir casi de inmediato el texto de sus conferencias, homilías, entrevistas, etc. Me quedó claro que es imposible resumir en una cuartilla la sapiencia de sus consejos, sus años vividos, sus conocimientos acumulados, su profunda espiritualidad; sobre todo sus recias palabras, que fuerzan a pensar tanto a devotos como a escépticos.

Me admiró la manera como manejó la difícil situación social, política y económica  por la que atravesamos. Su actitud bondadosa me recordó los años mozos, aquellos tiempos en que los padres casi sin lastimarnos pero con gran firmeza, señalaban nuestros errores.

Su Santidad Benedicto XVI sintió la alegría y la fidelidad de los mexicanos, pero también palpó su sufrimiento por la violencia extrema que le ahoga, la corrupción y el desempleo. La iglesia católica tiene un gran compromiso con el pueblo de México, por eso debe fortalecerlo para que no desista en su lucha contra el mal.

Para lograr la paz que tanto imploramos, es necesario primero anunciar a Dios, al Dios que nos ama y quiere nuestro bien. La iglesia renovadora debe educar las conciencias, educar en la responsabilidad moral, desenmascarar el mal, romper la idolatría por el dinero que esclaviza, acabar con las falsas promesas, la mentira y la estafa que está detrás de la droga y el poder.

Las personas necesitamos confiar en lo eterno, si Dios está en lo infinito, no tenemos para qué crearnos falsos paraísos terrenos, ni necesidades ni satisfactores frívolos, ni buscar una sexualidad desordenada, eso nos pasa porque tenemos ausencia de Dios. Por eso es muy importante que le invoquemos, que esté presente entre nosotros en el día a día, accesible con su bondad y con su verdad, esa verdad que todos deseamos conocer.

Existe un alto porcentaje de católicos que sufren esquizofrenia moral, (desequilibrio entre moral individual y moral pública) en lo privado son excelentes católicos, creyentes, hombres de fe, pero en lo público siguen otros caminos que no corresponden a los grandes valores del Evangelio, impidiendo así la fundación de una sociedad justa.

Es apremiante educar para superar esta esquizofrenia, porque la moral pública debe ser una moral razonable, compartida y practicada por creyentes o no, es una moral de la razón. A través de la fe podemos ver mejor tantas cosas, que también ve la razón, pero es la fe la que nos sirve para liberar a la razón, de esos falsos intereses que nos aniquilan.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Tienes un punto de vista retrógrada, el hombre no necesita a Jehová. Mi dios es Amok, un unicornio rosa. ¿Su capa de oro ayuda a la pobreza? ¿Sus millones en oro ayudan a la pobreza?

No es criticar es emitir un juicio sobre algo y decir si está bien o mal desde nuestro punto de vista, es una opinión porque tengo libertar de expresión. Te diría más cosas pero dudo mucho que cambies de opinión porque a los fervientes creyentes es muy complicado hacer que reflexionen.

El Papa no escribió sus discursos, lo hicieron otras personas ¿de qué mensaje hablas?

PD: si no publicas este comentario, no veo sentido de por qué permitas comentarios, además serás una inmadura.

Anónimo dijo...

Coincido con esa persona en el sentido de que el papa esta muy lejos de ser un digno representante de Jesucristo, dado que El fue una persona muy humilde y en cambio el papa porta unas vestiduras por demas lujosas y muchas veces las acciones de algunos sacerdotes catolicos son nefastas!