EMPRESARIOS DEL CHICLE Y LAS FRITANGAS.
Ningún país puede lograr el
crecimiento sostenido
sin un grado significativo
de inversión en recursos humanos".
Gary S. Becker, premio Nobel
Economía 1992
La violencia generada por el narco, la trata de
personas, la delincuencia organizada en suma, esta ocultando la realidad que
viven hoy miles de jóvenes egresados de todas las universidades de México: Uno
de cada cuatro mexicanos, de acuerdo con las estadísticas, es joven, y
alrededor de un millón de ellos no cuenta con oportunidades de empleo ni
opciones para desarrollarse de manera profesional y académica.
La ineficiencia de la casta gobernante ha
desperdiciado millones de pesos en su
escenario de Democracia ala Mexicana y ha cancelado la oportunidad que tuvo México
para invertir en la generación de riqueza social y económica que asegurara una
calidad de vida digna a todos los mexicanos.
Hoy, los universitarios egresados con titulo están
engrosando las filas del desempleo con la carga económica que representa cada
día a los pagadores de impuestos el sostenimiento de Escuelas Superiores. Las
solicitudes llenan archivos de todas las agencias de empleo públicas y privadas
sin que la esperanza de lograr un primer empleo se vuelva una realidad.
La solución, por lo menos así lo expresó el
Director de la UANE Campus Piedras Negras, es que los jóvenes deben de dejar de
soñar en que se puedan convertir en científicos, especialistas en medicina,
investigadores en Humanidades o generadores de Tecnología propia y se
conviertan en empresarios.
Quizás lo mejor para nuestros jóvenes sea
convencerlos que abandonen definitivamente la escuela y se integren a la
maquila para que se conformen con salarios de subsistencia porque al Director
de una UNIVERSIDAD PRIVADA se le olvida que para que exista el consumo TIENE
que haber ingresos. Y la educación es tal vez la única variable de las
políticas sociales que tiene la virtud de impactar simultáneamente en la
competitividad económica, la equidad social, la conducta económica de la
ciudadanía, la productividad, y la creatividad de las personas y las empresas.
¿Cómo pretendemos elevar nuestra competitividad
en el mundo global si seguimos siendo un país exportador de materia prima, de
mano de obra calificada y no calificada y de productos maquilados con salarios
de hambre?
Quizás las Universidades de Tercera apuestan a
egresados conformistas que no cuestionen
la acumulación de riquezas en unas cuantas manos mientras que la corrupción de
la casta gobernante, muchos de ellos escapados de las aulas universitarias, se
han labrado su futuro económico protegiendo al 1% de la población que hoy,
igual que en el periodo previo a la Independencia de México, es dueña de la
riqueza de la nación.
Una visión de futuro en las aulas que nos
cuestan a los mexicanos que pagamos impuestos es creer que la Universidad
existe para promover las transformaciones indispensables para el
mejoramiento económico, social y político del país; que el 90% de la investigación del país se desarrolla
en las universidades públicas y es fundamental para mantener la competitividad
del sector productivo nacional.
Hoy los países mas desarrollados saben que la educación superior
es la base para la investigación, la innovación y la creatividad, por lo que,
los gobiernos tienen la responsabilidad de darle su apoyo económico. Pero
también tienen la responsabilidad de asegurar el reparto equitativo de la
riqueza y eso solo se logra promoviendo la inversión productiva en trabajos de
calidad. Ha mejores salarios, mayor pago de impuestos y mas consumo.
Apostar
al TRABAJO, a los TRABAJADORES y a su fuerza laboral pudo hacer de Japón,
Alemania y ahora de China países que se levantaron de las cenizas de la guerra.
A los
mexicanos nos falta creer en nosotros mismos para expulsar del poder a la Casta
enquistada que nos tiene hoy con más de 40 millones de pobres, una clase media
en retroceso y una visión de que la riqueza esta en la venta de chicles o
fritangas en la calle para “volverse empresario en un país de hambre”.
Profra. Josefina Sánchez P.
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