Por: Dr. Marco Antonio Morales D.
Hoy es Halloween, saldrán a las calles nuestros niños disfrazados o simplemente con pintura en la cara a pedir dulces, muchos adultos asistirán disfrazados a alguna reunión todos recordando algo que poco o nada saben sobre los orígenes de esta fiesta Celtica y comercializada por nuestros vecinos como algo normal.
¿Y que pasa con nuestras tradiciones, con el Día de los Muertos?, el tema es cada año reiterativo, el rescate de nuestras tradiciones, este festejo si es de “Nosotros”, es de origen prehispánico
Mientras que el día de los muertos es una tradición muy nuestra, Halloween es algo deformado y compuesto de aspectos deformados y negativos.
Halloween es un festival que celebraban los celtas (sociedades controladas por sacerdotes druidas) señalando el inicio del invierno, hasta el 31 de octubre reinaba Baal, dios de las cosechas, de la primavera y el verano, y desde el 1 de noviembre, reinaba Samhain, el dios de la muerte, de ahí que el naranja sea la representación del otoño y el negro el de la muerte, esa noche del 31 era un intervalo entre los dos reinados, los muertos deambulaban por el mundo de los vivos.
Hoy en día esta noche es la más importante del año satánico, A "All Hallow" o "All Holly" se agregó "en": abreviatura de "evening", que significa anochecer, momento en que empieza la festividad, de ahí el nombre de "Halloween".
El Halloween llegó a Estados Unidos como parte de una tradición religiosa muy antigua, pero a la vez, rodeado de una cauda de esotéricas ramificaciones que han originado mitos y leyendas negras, entremezclado la magia, los cultos sincréticos y las creencias religiosas impregnadas de superstición.
El Festival de Samhain representaba el fin del verano y la fiesta de la cosecha, durante el mismo, se hacían sacrificios de animales y de humanos "inservibles" que no eran de utilidad para los miembros de la tribu (minusválidos, ciegos, locos y estériles), que servían para ofrendarse al señor de las cosechas.
Noche terrífica es la de Halloween que, por sus formas externas e impulsado por diversas y variadas causas, principalmente impulsados por un afán de comercial y mercantilista, se ha impuesto en otras latitudes, desplazando en la superficie a las costumbres autóctonas.
Los primeros días de cada mes de noviembre en México recordamos con una fiesta muy especial a nuestros familiares y amigos muertos, mientras en otras culturas estas son fechas de tristeza, nosotros nos vertimos en los cementerios cargados de alegría, de flores, comida, bebida y otros enseres para decirles a nuestros muertos cuánto les seguimos amando.
Se dice que la fiesta de los muertos estuvo vinculada al calendario agrícola prehispánico ya que esta era celebrada a inicio de la cosecha, banquete que se compartía hasta con los muertos, los antiguos mexicanos admitían que la muerte y la vida eran partes de una unidad, así, la muerte no era considerada como el fin de la vida, sino como parte importante del camino hacia algo mejor, Mictlán era el lugar de los muertos, donde esperaban a un mejor destino denominado Tlalocan, esta creencia es compartido con muchas culturas y religiones, sin que existiera contacto entre ellas.
La celebración Azteca original era en los meses de julio y agosto pero después de la conquista por los españoles se le hizo coincidir con la festividad Cristiana del Día de Todos Santos, en un esfuerzo fallido para transformar las costumbres profanas de los indígenas.
En el México actual, la festividad de muertos es el 2 de Noviembre, día en que las almas de los adultos fallecidos regresan a pasar un tiempo entre sus familiares y amigos para disfrutar de su compañía, así como de las ofrendas de comida, bebida, flores y música.
Las familias vamos a los panteones a visitar las tumbas de nuestros muertos, la fiesta empieza un día antes, el día de los muertos menores de edad conocido como Día de los Angelitos, cuando las almas de estos niños regresan con sus familiares para disfrutar y ser alimentados, desde muy temprano se empieza con limpiar y acicalar las tumbas, luego se cubren de flores multicolores, entre las que predominan zenpasuchitlles o cempazuchitl, denominadas flor de muerto y que son amarillas o color naranja, se agregan velas de cera, braceros de barro con incienso, fotos de los difuntos y ofrendas de sus comidas y bebidas favoritas, se agregan imágenes cristianas, donde predomina la Virgen de Guadalupe, la familia y amigos ahí reunidos para recibir el alma de sus difuntos se dedican a platicar añoranzas, planes futuros, hablan de los familiares lejanos, rezan, comen y beben, pero rara vez se embriagan, mole negro, pan de muerto, galletas, calaveras y ataúdes de azúcar, dulce de calabaza son algunos de los platillos típicos de esta fiesta, aunque cada región se engalana con sus comidas típicas.
El papel picado forma parte fundamental de las ofrendas, técnica que sirve para armar enormes festones policromos con figuras de esqueletos y flores, en algunas zonas del país se construyen altares caseros o en las oficinas para celebrar el Día de Muertos, estos se dedican a los familiares muertos y también están repletos de flores, veladoras, comida y bebida, los que son destinados a las almas de los niños que han fallecido se adornan con dulces y juguetes tradicionales.
Las figuras elaboradas de azúcar características en las tumbas y altares caseros, estas calacas de dulce casi siempre llevan en la frente nombres de muertos o vivos. Los niños suelen comerse estos figurines durante la festividad.
Uno de los aspectos mas celebrados es la creación de las ¨Calaveras¨, estas rimas populares buscan a través de frases y oraciones cortas burlarse de los vivos, le quitan solemnidad a la muerte, jugamos y nos burlamos de ella para satirizar a vivos y muertos, estos versos humorísticos suelen ser publicados en los periódicos y revistas para criticar o hablar de personajes de la farándula, políticos e intelectuales, la muerte la convertimos en algo gracioso y mordaz, cuando alguien se muere utilizamos expresiones como ya se peló, se lo llevó la parca, se petateó, estiró la pata, hay que cafetearlo, amarro las cabras, etc.
De acuerdo a esta ancestral tradición, nuestros muertos vienen de Mictlán, un lugar no terrenal que los antiguos dioses crearon para que tengan un lugar agradable donde reposar apaciblemente en espera del día cuando regresarán a visitarnos, visita donde los sentimos de nuevo entre nosotros, en esta visita cordial de nuestros difuntos no hay duelo, es sin dolor ni llanto, no hay tristeza, son momentos de alegría, el banquete para muertos y vivos se da en jacales y mansiones, en camposantos y altares, de norte a sur, del este al occidente de nuestro país, es la festividad Mexicana más mística y tradicional; el Día de los Muertos.
Los mexicanos del norte no conservamos muchas de las tradiciones del centro y sur del país esta festividad del Día de los Muertos tiende a desaparecer en esta zona del país, en el centro y sur de México, tanto en zonas rurales como grandes ciudades, esta fiesta ha conservado su esencia mística.
Hoy es Halloween, saldrán a las calles nuestros niños disfrazados o simplemente con pintura en la cara a pedir dulces, muchos adultos asistirán disfrazados a alguna reunión todos recordando algo que poco o nada saben sobre los orígenes de esta fiesta Celtica y comercializada por nuestros vecinos como algo normal.
¿Y que pasa con nuestras tradiciones, con el Día de los Muertos?, el tema es cada año reiterativo, el rescate de nuestras tradiciones, este festejo si es de “Nosotros”, es de origen prehispánico
Mientras que el día de los muertos es una tradición muy nuestra, Halloween es algo deformado y compuesto de aspectos deformados y negativos.
Halloween es un festival que celebraban los celtas (sociedades controladas por sacerdotes druidas) señalando el inicio del invierno, hasta el 31 de octubre reinaba Baal, dios de las cosechas, de la primavera y el verano, y desde el 1 de noviembre, reinaba Samhain, el dios de la muerte, de ahí que el naranja sea la representación del otoño y el negro el de la muerte, esa noche del 31 era un intervalo entre los dos reinados, los muertos deambulaban por el mundo de los vivos.
Hoy en día esta noche es la más importante del año satánico, A "All Hallow" o "All Holly" se agregó "en": abreviatura de "evening", que significa anochecer, momento en que empieza la festividad, de ahí el nombre de "Halloween".
El Halloween llegó a Estados Unidos como parte de una tradición religiosa muy antigua, pero a la vez, rodeado de una cauda de esotéricas ramificaciones que han originado mitos y leyendas negras, entremezclado la magia, los cultos sincréticos y las creencias religiosas impregnadas de superstición.
El Festival de Samhain representaba el fin del verano y la fiesta de la cosecha, durante el mismo, se hacían sacrificios de animales y de humanos "inservibles" que no eran de utilidad para los miembros de la tribu (minusválidos, ciegos, locos y estériles), que servían para ofrendarse al señor de las cosechas.
Noche terrífica es la de Halloween que, por sus formas externas e impulsado por diversas y variadas causas, principalmente impulsados por un afán de comercial y mercantilista, se ha impuesto en otras latitudes, desplazando en la superficie a las costumbres autóctonas.
Los primeros días de cada mes de noviembre en México recordamos con una fiesta muy especial a nuestros familiares y amigos muertos, mientras en otras culturas estas son fechas de tristeza, nosotros nos vertimos en los cementerios cargados de alegría, de flores, comida, bebida y otros enseres para decirles a nuestros muertos cuánto les seguimos amando.
Se dice que la fiesta de los muertos estuvo vinculada al calendario agrícola prehispánico ya que esta era celebrada a inicio de la cosecha, banquete que se compartía hasta con los muertos, los antiguos mexicanos admitían que la muerte y la vida eran partes de una unidad, así, la muerte no era considerada como el fin de la vida, sino como parte importante del camino hacia algo mejor, Mictlán era el lugar de los muertos, donde esperaban a un mejor destino denominado Tlalocan, esta creencia es compartido con muchas culturas y religiones, sin que existiera contacto entre ellas.
La celebración Azteca original era en los meses de julio y agosto pero después de la conquista por los españoles se le hizo coincidir con la festividad Cristiana del Día de Todos Santos, en un esfuerzo fallido para transformar las costumbres profanas de los indígenas.
En el México actual, la festividad de muertos es el 2 de Noviembre, día en que las almas de los adultos fallecidos regresan a pasar un tiempo entre sus familiares y amigos para disfrutar de su compañía, así como de las ofrendas de comida, bebida, flores y música.
Las familias vamos a los panteones a visitar las tumbas de nuestros muertos, la fiesta empieza un día antes, el día de los muertos menores de edad conocido como Día de los Angelitos, cuando las almas de estos niños regresan con sus familiares para disfrutar y ser alimentados, desde muy temprano se empieza con limpiar y acicalar las tumbas, luego se cubren de flores multicolores, entre las que predominan zenpasuchitlles o cempazuchitl, denominadas flor de muerto y que son amarillas o color naranja, se agregan velas de cera, braceros de barro con incienso, fotos de los difuntos y ofrendas de sus comidas y bebidas favoritas, se agregan imágenes cristianas, donde predomina la Virgen de Guadalupe, la familia y amigos ahí reunidos para recibir el alma de sus difuntos se dedican a platicar añoranzas, planes futuros, hablan de los familiares lejanos, rezan, comen y beben, pero rara vez se embriagan, mole negro, pan de muerto, galletas, calaveras y ataúdes de azúcar, dulce de calabaza son algunos de los platillos típicos de esta fiesta, aunque cada región se engalana con sus comidas típicas.
El papel picado forma parte fundamental de las ofrendas, técnica que sirve para armar enormes festones policromos con figuras de esqueletos y flores, en algunas zonas del país se construyen altares caseros o en las oficinas para celebrar el Día de Muertos, estos se dedican a los familiares muertos y también están repletos de flores, veladoras, comida y bebida, los que son destinados a las almas de los niños que han fallecido se adornan con dulces y juguetes tradicionales.
Las figuras elaboradas de azúcar características en las tumbas y altares caseros, estas calacas de dulce casi siempre llevan en la frente nombres de muertos o vivos. Los niños suelen comerse estos figurines durante la festividad.
Uno de los aspectos mas celebrados es la creación de las ¨Calaveras¨, estas rimas populares buscan a través de frases y oraciones cortas burlarse de los vivos, le quitan solemnidad a la muerte, jugamos y nos burlamos de ella para satirizar a vivos y muertos, estos versos humorísticos suelen ser publicados en los periódicos y revistas para criticar o hablar de personajes de la farándula, políticos e intelectuales, la muerte la convertimos en algo gracioso y mordaz, cuando alguien se muere utilizamos expresiones como ya se peló, se lo llevó la parca, se petateó, estiró la pata, hay que cafetearlo, amarro las cabras, etc.
De acuerdo a esta ancestral tradición, nuestros muertos vienen de Mictlán, un lugar no terrenal que los antiguos dioses crearon para que tengan un lugar agradable donde reposar apaciblemente en espera del día cuando regresarán a visitarnos, visita donde los sentimos de nuevo entre nosotros, en esta visita cordial de nuestros difuntos no hay duelo, es sin dolor ni llanto, no hay tristeza, son momentos de alegría, el banquete para muertos y vivos se da en jacales y mansiones, en camposantos y altares, de norte a sur, del este al occidente de nuestro país, es la festividad Mexicana más mística y tradicional; el Día de los Muertos.
Los mexicanos del norte no conservamos muchas de las tradiciones del centro y sur del país esta festividad del Día de los Muertos tiende a desaparecer en esta zona del país, en el centro y sur de México, tanto en zonas rurales como grandes ciudades, esta fiesta ha conservado su esencia mística.
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