Desde Acá…
Adecuada o Inadecuada la Estrategia
Para Enfrentar la Crisis Recesiva en México
lic. chávez y pacho
Partiendo de la premisa que nuestro país se encuentra inmerso en uno de los peores procesos recesivos de los últimos 70 años y considerando que la crisis no fue fabricada en México, sino importada de los Estados Unidos, con efectos internacionales que ha dañado las principales economías del mundo, es que se debe reconocer principalmente, que debido a la caída de los precios internacionales del petróleo, la reducción sufrida en el sector turismo, la contracción en los niveles de producción de manufacturas, los efectos negativos del brote de la gripe humana A(H1B1), así como la disminución de las exportaciones y una endeble recaudación fiscal, tiene a México postrado al amparo de las decisiones que se tomen para superar tal circunstancia.
En este sentido, la autoridad reconoce que la situación financiera obligará a sostener importantes recortes al gasto público para el año 2010, para lo cual, se espera que la instalación de la próxima legislatura a partir del 1° de septiembre, se estrene tomando cartas en el asunto, es decir, tener la capacidad de análisis de la propuesta del ejecutivo para la aprobación del presupuesto que regirá para el año 2010.
Entre otros aspectos a considerar, cualquier caída de cinco puntos o más en el PIB, debe considerarse de suma gravedad, ya que los niveles de esas cifras se traducen rápidamente en desempleo y la miseria que esa circunstancia arrastra, además de ser un desarticulador del aparato productivo, por tanto, el efecto petróleo se convertirá en un precursor para considerar un presupuesto digamos humildemente austero para el año venidero. Sin embargo, en boca del Secretario de Hacienda, se establece que no se puede gastar lo que no se tiene, además de considerar que el déficit público y lo que se aplique como recorte presupuestal, podrá mostrar sus frutos hasta el año 2012.
Como consecuencia del planteamiento anterior, el gobierno supone que para 2010, se dejara de recaudar vía impuestos algo así como 23 mil millones de dólares, sin perder de vista, que conjuntamente con esta situación habrá que considerar un ingreso menor por la venta de petróleo, ya que para 2010, no se contrató ningún seguro para proteger las variaciones de precios internacionales del petróleo, lo que hace suponer que tales precios, difícilmente superar en promedio el nivel de 53.00 dólares por barril de la mezcla mexicana.
Con este incierto panorama, creemos que una de las formulas para enfrentar la crisis recesiva, no es a través de reducir el gasto ni el presupuesto, nada más simplista, que pretender solucionar un profundo problema con formulas aspirinescas, por el contrario, pensamos que ahora es el momento para echar mano de toda la capacidad, talento y recursos económicos para superar esta circunstancia que esta menoscabando profundamente a los sectores más sensibles de la sociedad.
El desafió es, el ahora o nunca, estamos convencidos que este es el momento de echar toda la carne al asador, lo que significa, mayores recursos para infraestructura básica, carreteras, puentes, aeropuertos, comunicaciones y transportes, desarrollo de fuentes alternas para generar energía eléctrica limpia, nuevos proyectos de investigación, exploración y extracción petrolera, minería, recuperación de cuencas hidráulicas aptas para la agricultura, ganadería, silvicultura y pesca, desarrollo tecnológico, impulso a la creatividad, apoyo a las Mypes y cuantas cosas más. Lo único que no se vale es agachar la cabeza, sentarse a lloriquear y no tener los suficientes arrestos para salir airosos de tan penosa situación.
La pregunta es, para que sirven entonces las reservas internacionales y la capacidad que tiene el país para obtener créditos que se apliquen específicamente al desarrollo económico. La inversiones en infraestructura, es sin duda la mejor formula para generar empleo, crear riqueza, y todo lo que de manera natural se desprende de estos procesos.
Como la ves, ya sabes que la mejor opinión es la tuya.
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